Con una peregrinación clausuran Mes de la Familia en El Paraíso
El padre Abel Triminio, párroco de El Paraíso, dio la bendición a varias familias que dieron una ofrenda al Señor.
Decenas de feligreses conmemoraron la clausura del mes dedicado al Matrimonio y la Familia con diversas actividades entre las que resaltó una romería por las calles de la ciudad.
Texto y fotos: Roger Padilla
pad_roger@hotmail.com
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Un ambiente de fiesta, compartir y solidaridad se vivió durante todo el Mes del Matrimonio y la Familia, en la parroquia San Juan Bautista de la ciudad oriental del café. Concluyeron con una peregrinación organizada por la Pastoral Familiar de este lugar.
Todos los grupos y movimientos de la Parroquia se vieron involucrados en las acciones que se realizaron. Se llenaron de alegría por aportar un poquito de su tiempo en pro del mejoramiento familiar. Durante el mes, se desarrollaron muchas actividades como peregrinaciones, vigilias, eucaristías y bodas gratis.
La Pastoral Familiar organizó la peregrinación con la que finalizaba el mes, por las calles principales de la ciudad, quienes sin dudarlo dijeron si a este llamado al disponer de su tiempo y creatividad para organizar este recorrido, esperando que todo agradara a los fieles de esta ciudad.
FIESTA
El día llego, y la tarde estaba acompañada por un fuerte y hermoso sol radiante que no detuvo a los centenares de hermanos en su caminar, los cuales forman parte de los diferentes grupos de la parroquia, centros educativos y Sociedad Civil.
Como ya es una tradición de esta ciudad, el coro Madre Teresa eran quienes a través de sus cantos llenaban de alegría las calles y anunciaban que Dios está vivo en nosotros y en nuestras familias. Los creyentes llevaban en sus manos globos de colores, pancartas y realizaron varias carrozas alegóricas al momento, lo que demostraba la armonía por celebrar este mes.
Durante la peregrinación se realizaron cuadros vivos con temas relacionados a la familia, con el objetivo de despertar en los presentes el sentimiento de evangelización y de poner a Cristo en medio de este núcleo.Asimismo, muchos hermanos que viven el Sacramento del Matrimonio compartían sus testimonios de vida, las pruebas que han pasado pero que con la ayuda de Dios y el acompañar de nuestra madre María, han podido superar y pueden seguir juntos como pareja.
La peregrinación culminó con la Eucaristía, donde bonito fue ver que el templo estaba abarrotado por hermanos necesitados del amor y la misericordia de nuestro Padre Celestial. Durante la Homilía, el padre Abel Triminio se dirigió a los presentes y les recordó que con Cristo todo es posible, que Él debe ser quien reine en nuestras familias. Durante la Misa muchas familias presentes se encargaron de entregar varias ofrendas al Señor. El padre Abel al final los invitó a subir al Presbiterio para asperjarlos con agua bendita y hacerles una bendición solemne. El compromiso sigue, y para el siguiente año se espera continuar con estas tradiciones, aumentando el amor en los fieles y haciendo cada mes más numerosa este peregrinar.
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