Semanario FIDES

EL DECANO DE LA PRENSA NACIONAL

“Todavía no tenemos visualizada de la magnitud de la corrupción en Honduras”

 Carlos Paz, director Cáritas San Pedro Sula.

Carlos Paz, director Cáritas San Pedro Sula.

El escándalo de corrupción del Instituto Hondureño de Seguridad Social, IHSS, ha sido un golpe profundo y con muchas secuelas negativas para Honduras,  sin embargo, esta vez los hondureños se unen, para alzar su voz y para actuar en defensa de su país. Y esa fuerza está motivando a profesionales de justicia a seguir  investigando a través de un frágil y peligroso hilo que conduce hacia los casos de corrupción  que están dañando a este país.
Texto y fotos: Johanna Kattan
jokattan@unicah.edu
Síguenos en http://www.fidesdiariodigital.com
Sampedranos acudieron con fuertes expectativas al conversatorio Corrupción, Impunidad y Movimiento de Indignados en Honduras, un evento organizado por la Pastoral Social Cáritas Diócesis de San Pedro Sula.
“Los acontecimientos relacionados con el escándalo de corrupción del Seguro Social en Honduras y que un sentido amplio implica al Sistema de Salud Nacional y se extiende a círculos de altos funcionarios de gobierno; a entidades sociales y económicas, a instituciones públicas y la estructura de partidos políticos del país ha generado en la población hondureña un sentimiento de hartazgo e indignación capaz de movilizarla de manera espontánea –en primer lugar- y que actualmente busca propiciar una articulación integral, plural y diversa en la búsqueda de soluciones definitivas a un problema con raíces profundas de tipo históricas y culturales”, expresó el director de Cáritas Diocesana, Carlos Paz.
Paz indicó que ante el sentir de esta ola de corrupción, el Obispo Ángel Garachana, hizo un llamado Cáritas para socializar la reflexión y discernimientosobre la realidad actual.  De esta manera surge el conversatorio, donde diversidad de representantes de la sociedad civil estuvieron puntuales y atentos.
El conversatorio Corrupción e Impunidad en Honduras y Movimientos de Indignados, organizado por Cáritas Diocesana, se realizó en la Universidad Católica de Honduras, Campus San Pedro y San Pablo. En la mesa principal estuvieron el director de Cáritas en San Pedro Sula, Carlos Paz, la directora del Consejo Nacional Anticorrupción, CNA, abogada Gabriela Castellanos, padre José Canales de la Parroquia  San Pedro Apóstol y los jóvenes Martha Mejía y Víctor Ordoñez del Movimiento Indignados
Al inicio el abogado Paz mencionó que este conversatorio no tiene el objetivo de encontrar un recetario de qué hacer y qué no hacer, sino que comprender como Iglesia insertos en esta realidad no como factor de poder, sino de consenso y de motivación para la acción. El evento se basó en cuatro bloques centrales, comenzando con los criterios para la valoración ética del problema, dirigido por el sacerdote hondureño José Canales, destacando condiciones y actitudes morales que den señales de conversión y transformación.
“Es tan inmoral el adulterio en el matrimonio como también es inmoral el robo de medicamentos en un hospital público. La moral debe estar en todo los ámbitos en que se mueve la persona humana sin restricciones”, expuso Canales. “Los acontecimientos que se están dando actualmente en Honduras, reflejan desde todo punto de vista un reclamo moral.  El clamor popular demandan unos comportamientos morales de parte de quienes administran los bienes del Estado”, agregó.
El padre Canales hizo  énfasis “sobre dóndeestaban los órganos contralores del estado que no pudieron detectar a tiempo el robo descomunal e inmisericorde de los fondos del IHSS? En Tegucigalpa hay unos edificios elegantes que dicen Contraloría General de la República? Las consecuencias que hemos podido darnos cuentanen este último año, pues significa que hay edificios con personas que están allá devengando unos sueldos pero los resultados son practicante nulos”.
“El afán de enriquecimiento personal, familiar, o de grupos a cualquier precio ha dado como resultado un país terriblemente desigual y por lo tanto una sociedad injusta en todas las direcciones. Esto no es nuevo pero lo venimos arrastrando desde que somos país, pero hay que comenzar en algún momento y parece que ahora sí…”, mencionó el padre Canales. También hizo  referencia a los numerales del 410 al 412 del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, que hablan sobre la componente moral de la representación política”.

LA CORRUPCIÓN ES UN MONSTRUO
La directora de la Consejo Nacional Anticorrupción, CNA, abogada  Gabriela Castellanos, abordó  el tema de La Corrupción en Honduras.  Indicó que se piensa erróneamente que el CNA esuna estructura fiscal y  aclaró que los miembros del CNA son ciudadanos comunes, “nace en 2005 mediante acuerdo y desde ese año empieza a trabajar el tema de corrupción  no de manera frontal como lo hacemos actualmente. El Equipo del CNA está conformado por investigadores, ex policías que cumplen algunos requisitos,analistas jurídicos, analistas financieros y analistas en sistemas”.
En total son unas 23 personas, una estructura pequeña,  pero que ha dado grandes golpes a la corrupción “en comparación a una estructura de cinco mil  personas, con un presupuesto importante la gran olla de corrupción fue abierta en Marzo 2014, “ fue la primera línea de investigación en referencia al IHSS”.
“La corrupción es un monstruo, todavía no tenemos visualizada la magnitud de la corrupción en Honduras”, dijo la abogada Gabriela. ´´La corrupción son estructuras  fuertes en muchas de las instituciones   y muchas ocasiones nos lleva al tema de lavado de activos eso significa que también hay narcotráfico y eso lo hemos encontrado en el tema de salud pública y otras líneas de investigación que también hemos tenido´´
Detalló que hay una instancia de sociedad civil que ha mencionado que  el CNA ha entregado  15 expedientes al Ministerio Público  y al Tribunal Superior de Cuentas “y todavía tenemos otras líneas de investigación´´
Explicó un medio de investigación,  enriquecimiento ilícito, que es ver el patrimonio de una persona y compararlo con los ingresos que tiene esa persona y “ahí vimos que eso no estaba bien, teníamos empleados del Seguro Social con un sueldo aproximado de veinte mil, treinta mil hasta cuarenta mil lempiras  pero que tenía un patrimonio por más de 16 millones de lempiras, como el caso de JoséZelaya, jefe de bodega de insumos,  tenía un patrimonio de 100 millones de lempiras”.
También comentó que han entrega líneas de investigación decinco alcaldías, el caso del Registró Nacional de las Personas y no ha pasado nada, líneas  del Consejo Nacional contra el Narcotráfico ( que ya no funciona) “por gestiones del CNA pues el presupuestó tenía una planilla fantasma”.

Movimiento indignados
Los jóvenes Martha Mejía y Víctor Ordoñez del Movimiento indignados, hablaron de los orígenes del movimiento,  “es un sentimiento común, nace de la causa común. La primera cita fue el 26 de abril en el Monumento a la Madre fueron tal vez 20 a 30. Es una necesidad de participar todos para señalar los actos de corrupción”.

La componente moral de la representación política
410 Quienes tienen responsabilidades políticas no deben olvidar o subestimar la dimensión moral de la representación, que consiste en el compromiso de compartir el destino del pueblo y en buscar soluciones a los problemas sociales. En esta perspectiva, una autoridad responsable significa también una autoridad ejercida mediante el recurso a las virtudes que favorecen la práctica del poder con espíritu de servicio842 (paciencia, modestia, moderación, caridad, generosidad); una autoridad ejercida por personas capaces de asumir auténticamente como finalidad de su actuación el bien común y no el prestigio o el logro de ventajas personales.
411 Entre las deformaciones del sistema democrático, la corrupción política es una de las más graves 843porque traiciona al mismo tiempo los principios de la moral y las normas de la justicia social; compromete el correcto funcionamiento del Estado, influyendo negativamente en la relación entre gobernantes y gobernados; introduce una creciente desconfianza respecto a las instituciones públicas, causando un progresivo menosprecio de los ciudadanos por la política y sus representantes, con el consiguiente debilitamiento de las instituciones. La corrupción distorsiona de raíz el papel de las instituciones representativas, porque las usa como terreno de intercambio político entre peticiones clientelistas y prestaciones de los gobernantes. De este modo, las opciones políticas favorecen los objetivos limitados de quienes poseen los medios para influenciarlas e impiden la realización del bien común de todos los ciudadanos.
412 La administración pública, a cualquier nivel —nacional, regional, municipal—, como instrumento del Estado, tiene como finalidad servir a los ciudadanos: « El Estado, al servicio de los ciudadanos, es el gestor de los bienes del pueblo, que debe administrar en vista del bien común ».844 Esta perspectiva se opone a la burocratización excesiva, que se verifica cuando « las instituciones, volviéndose complejas en su organización y pretendiendo gestionar toda área a disposición, terminan por ser abatidas por el funcionalismo impersonal, por la exagerada burocracia, por los injustos intereses privados, por el fácil y generalizado encogerse de hombros ».845 El papel de quien trabaja en la administración pública no ha de concebirse como algo impersonal y burocrático, sino como una ayuda solícita al ciudadano, ejercitada con espíritu de servicio.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Información

Esta entrada fue publicada el 3 agosto 2015 por en Diócesis, San Pedro Sula.
A %d blogueros les gusta esto: