Este informe destaca que la búsqueda de sostenibilidad fiscal se está haciendo a costa del bienestar social y beneficiando a sectores particulares de la élite económica.Texto y fotos Lilian Flores
liflores@unicah.edu
Síguenos en http://www.fidesdiariodigital.com
Recientemente el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) presentó, mediante un foro organizado junto a la Fundación Friedrich Ebert, el documento “Un ajuste a la medida de las élites económicas, diagnóstico de las finanzas públicas hondureñas en 2014 y respectivas para 2015”.
Mediante el informe el Icefi muestra que la carga de la reducción del déficit fiscal estuvo basada en el aumento de los impuestos indirectos, mientras que al mismo tiempo se ampliaron exoneraciones y privilegios a grupos económicamente fuertes.
Asimismo se redujo la presentación de servicios públicos esenciales en educación y salud, así como los subsidios a sectores de bajos ingresos. Dicho informe refleja que en el caso de las exoneraciones, no solo se aumentaron sino que se dejaron lagunas en las leyes para que fueran aprovechadas por sectores económicos para no pagar impuestos, como en el caso del sector turismo.
ESTADÍSTICAS
El Icefi reconoce la importancia de la reducción del déficit fiscal de 7.9% del PIB en 2013 a 4.4% en 2014; sin embargo cuestionó la forma cómo se alcanzó dicha reducción. Del aumento de alrededor once mil millones de lempiras en impuestos en 2014, dos terceras partes provino de los impuestos indirectos que gravan el consumo, lo que representó un incremento de los ingresos en 1.6% del PIB.
En contraste, los impuestos directos, que gravan el ingreso y la riqueza, redujeron su participación en los ingresos tributarios de 32.5% en 2013 a 29.9% en 2014, siendo su contribución al aumento de ingresos de únicamente 0.1% del PIB.
En lo que se refiere al gasto público, se conoce los mejores controles presupuestarios al impedir los gastos sin asignación presupuestaria que en el pasado fueron fuente de mayores desequilibrios fiscales.
El gasto público en 2014 estuvo caracterizado por los siguientes aspectos: la reducción del peso de sueldos y salarios en el gasto total, el fuerte aumento del pago de intereses, la reducción de transferencias corrientes, la caída de la inversión pública y el fuerte aumento de las transferencias de capital.
ANALISIS
El instituto vuelve a destacar en este tercer diagnóstico que por el lado del gasto público, la reducción del nivel de la inversión pública continúa siendo preocupante y efectuará las posibilidades futuras de crecimiento económico. En efecto, el nivel de inversión pública en 2014 se redujo a 2.1% del PIB con respecto al 2.5% del año anterior y alcanzará un reducido 0.9% del PIB en 2015. Las inversiones a realizar por las alianzas público-privada, además de la opacidad manifiesta de sus contratos, no compensa la significativa caída de la inversión pública.
Por otra parte, las transferencias de capital muestran un aumento considerable en los programas presidenciales de “Vida Mejor” que junto con otros programas, llegan a más de ocho mil millones de lempiras cercanos al 2% del PIB. Mientras tanto los presupuestos de salud y educación permanecen prácticamente congelados para 2014 y 2015, mostrando similares niveles a los observados en 2013. Esto muestra que la integridad de la política social se ha ido perdiendo.
GASTOS
El gasto público en 2014 estuvo caracterizado por los siguientes aspectos: la reducción del peso de sueldos y salarios en el gasto total, el fuerte aumento del pago de intereses, la reducción de transferencias corrientes, la caída de la inversión pública y el fuerte aumento de las transferencias de capital.