Monseñor Juan José Pineda, fray José Luja Pérez superior provincial de la orden mercedaria, y los frailes Marino y Gerardo, recordaron con cariño al padre Juanito.
Para el padre Juanito, mil años en la presencia de Dios serán como un ayer, como una vigilia nocturna.
Lilian Flores
Colaboración Lourdes Zúniga
Síguenos en http://www.fidesdiariodigital.com
Recientemente como un signo de gratitud por el trabajo que realizó el Padre Juan Barrera Herrera en Honduras, se realizó en la parroquia Sagrada Familia una Eucaristía presidida por el Obispo Auxiliar Monseñor Juan José Pineda, y concelebrada por sacerdotes del Decanato Comayagüela Norte, junto al Provincial de la Orden de la Merced.La nostalgia fue notoria en cada uno de los feligreses que desde las diferentes comunidadesa las cuales el padre Juanito pastoreaba, llegaron para recordarlo con amor de buen pastor para sus ovejas.
Siempre con su sonrisa y su buen sentido del humor, así recuerdan sus feligreses al padre Juanito, quiena través del tiempo y su entrega generosa logró robarse el cariño y aprecio de grandes y pequeños.
MENSAJE
Monseñor Pineda animó a los feligreses a seguir adelante “Dios acepta todos los gestos, todo ese sentimiento, solidaridad y todas las celebraciones que queramos hacer para el padre Juanito, él las recibe y las guarda en su corazón, ya no está físicamente entre nosotros y a veces nos resistimos en darle a Dios lo que a Dios le pertenece, pero el día de hoy tenemos que decirle Gracias Señor, porque has tomado lo que a ti te pertenece”.
Los buenos recuerdos del padre Juanito siempre estarán en el corazón de quienes lo quieren, Monseñor Pineda recordó que cada vez que llagaba a esta parroquia y se quedaba cenando con los frailes, terminaban contando chistes.Pidió a los fieles no dejar que esa alegría muera, la alegría del servicio, la alegría de la consagración, la alegría de la parroquia, con la cual se caracterizó este querido sacerdote.