“En nombre de Cristo y de la Iglesia: por favor, no se cansen de ser misericordiosos”, dijo a los nuevos presbíteros .
Ciudad del Vaticano (AICA): La mañana del IV domingo de Pascua, en la 52º Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, el papa Francisco presidió el rito de ordenación presbiteral de 19 diáconos. La ceremonia se realizó en la Basílica de San Pedro.En esta ocasión el Pontífice recordó que en la raíz de toda vocación cristiana se encuentra la experiencia fundamental del éxodo, la experiencia de salir del propio yo para centrar nuestra vida en Jesús. De esta manera podremos escuchar y seguir la voz de Cristo Buen Pastor, dejándonos atraer y conducir por Él y consagrando a Él la propia vida.
En su homilía el Obispo de Roma señaló a los nuevos sacerdotes que “ejerciendo el ministerio sacerdotal serán participes de la misión de Cristo, único Maestro”. Serán quienes continúen con la obra santificadora de Cristo, mediante su ministerio el sacrificio espiritual de los fieles se hará perfecto unido al de Cristo. Asimismo el Papa les pidió “en nombre de Cristo y de la Iglesia: por favor, no se cansen de ser misericordiosos. Ustedes están para perdonar y no para condenar. Con el óleo santo darán alivio a los enfermos, y también a los ancianos: no sientan vergüenza de mostrar ternura con los ancianos”.
Finalmente, les exhortó “a participar en la misión de Cristo, Cabeza y Pastor, permaneciendo unidos a sus Obispo, esfuércense por reunir a los fieles en una sola familia para conducirlos a Dios Padre, por medio de Cristo en el Espíritu Santo. Tengan siempre presente el ejemplo del Buen Pastor, que no vino para ser servido, sino para servir, y buscar y salvar lo que estaba perdido”.